Estamos en la última etapa de esta 62 Legislatura, a poco más de un mes de que concluya el periodo ordinario de sesiones, el último que contempla la ley de estos tres años de trabajo en los que, con gusto, he participado en representación de mi estado, Jalisco.
El trabajo productivo y la importancia de las leyes que en casi tres años hemos aprobado no se mide por el número de propuestas, iniciativas o puntos de acuerdo que se hayan avalado o no, sino por la trascendencia de las leyes que se han analizado y que han modificado de manera profunda nuestro marco jurídico.
El Congreso de la Unión ha cumplido con su tarea de entrar a los temas más complejos y avanzar en reformas que hace más de una década ha esperado el país, pero que por intereses mezquinos, partidistas o personales, no habían podido avanzar. Recordemos que un gran número de reformas habían sido propuestas por Acción Nacional al estar al frente del Gobierno federal, sin embargo, la oposición optó por bloquear cualquier cambio a costa del desarrollo del país.
Hoy se ha logrado un gran número de esas reformas, sin embargo, comienza a ser tarde para aplicarlas. Acción Nacional impulso de manera intensa una reforma laboral, en telecomunicaciones, en energía y en educación. Después de dos lustros, estas reformas ya son una realidad; sin embargo, su aplicación dista mucho de los resultados deseados por diversos factores, el principal es el tiempo que llevan en dar resultados. Si estas reformas se hubieran aprobado cuando el PAN las propuso, en este tiempo no tendríamos qué preocuparnos por la fragilidad del peso, la baja en el desarrollo o el crecimiento de la inflación.
Pero como suele ocurrir en la política, hay fuerzas que se opondrán a todo, o que, principalmente, no avalarán nada si no le sacan raja política a las iniciativas, ese fue el caso de la reforma en telecomunicaciones o en energía, las cuales debieron haber sido avaladas hace una década a fin de que las finanzas nacionales dejaran de depender del petróleo o que nuestro país tuviera tarifas más justas en telefonía y que se ampliara la oferta televisiva, lo cual será posible ahora con dos nuevas cadenas de televisión que acaban de ser concesionadas.
Insistimos en que México requiere un cambio de rumbo. Un cambio real, un cambio justo, un cambio en el que todos participemos y en el que el gobierno asuma su responsabilidad.
Me siento muy satisfecha de formar parte de esta 62 Legislatura, la cual se enfrentó a grandes retos, a importantes leyes como hacía décadas no se abordaban, a un debate intenso y a enriquecedores encuentros con los que logramos avanzar en profundos cambios a partir del trabajo legislativo.
Hoy queda pendiente la aplicación de esas leyes, queda pendiente el trabajo del Ejecutivo y todo su gabinete, queda pendiente que den muestras reales de querer cambiar al país. Los pendientes ahora están en la agenda de la Presidencia de la República.
En lo personal creo que hemos evolucionado en importantes retos. Tenemos que avanzar y aportar lo que esté en nuestras manos y en colaboración con otros poderes y con las diferentes áreas de gobierno. Muy probablemente me toque enfrentar a mi nuevas tareas, una nueva encomienda bajo las siglas de mi partido, es por eso que hoy les comparto esta reflexión sobre la trascendencia del trabajo en la Cámara de Diputados.
Ya en su momento, al cierre, podremos conocer el trabajo en su totalidad, con números y fechas, sin embargo, ahora podemos decir que prácticamente se ha cumplido con una agenda ambiciosa, plural, amplia y transformadora. Quiero comentarles que ese espíritu con el que he realizado mi tarea en la Cámara de Diputados, será con el que desempeñe las tareas que me sean asignadas. En donde me encuentre pueden tener la certeza de que mi compromiso y mi esfuerzo estará destinado a lograr cambios en beneficio de los ciudadanos y la sociedad a la que represento. Desde ahí, puedo garantizarles, trabajaré para aportar hacia ese cambio de rumbo que tanto necesita nuestro país.
Por: Lucy Pérez Camarena
La entrada El compromiso con el cambio de rumbo aparece primero en La Jornada Jalisco.